Recuerdo hoy a Maurice Jarre. Ha muerto a los ochenta y cuatro años y fue, junto a Ennio Morricone y Nino Rota, principalmente, uno de los más grandes compositores de música dedicados al cine. Sus creaciones armonizaban y realzaban las situaciones o la belleza de las imágenes sin grandilocuencia. ¿Cómo no sentir la intensidad de las emociones de los protagonistas de El doctor Zhivago o de Ghost? ¿Cómo no identificar la soledad del desierto y la del alma angustiada de Thomas E. Lawrence, el singular espía de Lawrence de Arabia sin la música de Maurice Jarre. Bajo los efectos de este influjo fue que, en 1972, describí un momento del cuento El día en que el pueblo reventó de angustia de este modo: ...Desde entonces sé que hay esperanzas. Se lo dije a todos de la misma manera como lo hacía un hombre en una vieja película: saltando con su túnica blanca sobre los vagones de un tre, en el desierto arenoso. Yo lo hice saltando sobre los carros desvencijados en medio de la salinas. Sí, los caminos de la poesía son extraños.
7 comentarios:
Sí, me sumo al recuerdo de Maurice Jarre, un gran compositor para grandes películas. Imagen y música integrándose en la belleza.
Alberto Tugues
Alberto, creo que somos muchos los que sentimos su pérdida, pero nos deja su música que no por incidental es menos bella.
No había otro como él. Tal vez Ennio Morricone, para mi gusto.
A mí también me gusta mucho Nino Rota. Su música fue un aporte esencial a varias películas de Fellini, Lattuada, Visconti (Gatopardo) y Ford Coppola (El padrino). También, aparte del gran Morricone, Lalo Schifrin, aunque éste era menos cálido. Pero sí, Felipe, Jarre tenía algo arrebatador.
Totalmente de acuerdo...y Trevor Jones y Mancini.
Por supuesto La serie de la Pantera Rosa no sería lo mismo sin la música elegante de H. Mancini.
Días de vino y Rosas...
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