miércoles, 9 de septiembre de 2009

SOBRE EL POETA Y LA LIBERTAD

Vera Linhartova, citada por Milan Kundera en Un encuentro, afirma que «todo escritor es ante todo un hombre libre, y la obligación de preservar su independencia contra toda coacción pasa por delante de cualquier otra consideración». La escritora checa no se refiere únicamente a la represión política, sino a esas «coacciones insensatas» que «apelan a los sentimientos del deber hacia el país» natal. Sentimientos de deber por los cuales el escritor es tácito «guardián de la lengua» y deudor perenne de la patria y los valores que ella representa. Pero ¿qué es la patria sino una entelequia que legitima las más sutiles formas de coerción? ¿qué es la lengua sino un sistema de comunicación controlado por el poder para retroalimentarse en detrimento de la libertad de los ciudadanos?.
El poeta, como hombre libre, tiene la genuina obligación de romper con las formas argumentativas que tutelan las historias individuales y guían la imaginación de los lectores por callejones sin salida. El poeta, como hombre libre, crea su lengua y desde ella ejerce su derecho a la libertad y deja a sus semejantes expedito los caminos del pensamiento y la imaginación.
Del Cuaderno de notas de Manuel T.

4 comentarios:

Calvared dijo...

El poeta, como hombre libre, tiene no el derecho si no el deber de plasmar la realidad del sentimiento tal como nace, sin ningún tipo de corsé político manipulable o manipulado por el entorno. Creo que la grandeza de la vida reside ahí, en la libertad de volar por la imaginación y poder luego plasmar ese viaje sin ningún tipo de cortapisas.
Has hecho un análisis perfecto de lo que ha de ser la libertad del poeta.
Un abrazo

Antonio Tello dijo...

Así es Carlos, lo malo es que a muchos poetas/escritores se les llena la boca hablando de libertad, pero escriben como dictadores, quiero decir, sin dar opción al lector a dejar volar su propia imaginación.
Gracias por pasarte por aquí. Un abrazo.

Natalie Sève dijo...

Querido Antonio, comparto tu visión sobre que el creador debe procurar espacios de respiro en su obra, márgenes de misterio en donde el lector pueda imaginar y completar lo leído con su única impresión interior... de lo
contrario, ´cúal sería el profundo placer de leer?
Un abarzo
Natalie

Antonio Tello dijo...

Si la Literatura -con mayúscula- resiste el tsunami de tanta escritura superficial, es, querida Natalie, porque hay muchos escritores que tienen conciencia de la libertad y de sus formas de ejercicio. Besos.